#CharlieCharlie
El juego es muy simple: hay que colocar en equilibrio dos lápices en
forma de cruz sobre un papel con las palabras "sí" y "no". Posteriormente hay que decir las palabras “Charlie, Charlie are you there?” Y el espíritu contestará… aunque me parece muy extraño que conteste “No”, si no está ahí… pero bueno. Al final del juego hay que preguntar “Charlie, Charlie can we stop?” y si el espíritu contesta que no, o simplemente no se le hace esta pregunta y se abandona el juego, pasarán cosas extrañas a tu alrededor. (Se desconoce si el espíritu es bilingüe).
Si son como yo, ya han de estar cansados de tanta tontera en relación a l virul social #CharlieCharlie.
De acuerdo con la leyenda, Charlie es un espíritu mexicano (que al parecer no le gusta que le digan Carlos o sus papás tenían afinidad por nombres anglosajones o algo) que ronda por todo el planeta contestando preguntas de adolescentes. El fantástico poder de ultratumba de Carlos es mover ligeramente artículos de oficina colocados con fragilidad uno sobre otro desde el más allá. Pero, ¿qué causa este increíble fenómeno?
La respuesta es simple: la misteriosa fuerza de la gravedad.
Para empezar, los lápices están colocados en una posición poco natural y el reducido soporte entre ellos causa que en un punto el lápiz con la menor superficie de contacto se mueva a una posición más natural, ya sea por la más sutil ráfaga de viento o por la gravedad misma. Es por esto que el fenómeno es tan constante y puede repetirse varias veces.
Para poner esto a prueba y eliminar toda superstición, simplemente coloca la cruz de lápices en una superficie plana en cualquier momento del día y no hagas ninguna pregunta; eventualmente el lápiz de arriba se moverá a una posición donde tenga más soporte sin importar si invocaste el espíritu de Hitler o si cantaste lo poco que recuerdas de Gangnam Style.
Si pruebas ponerlos en la posición que indica el juego te darás cuenta de que, aunque no le hagas pregunta alguna, los lápices se mueven -o pueden hacerlo- de todas maneras.
La posición de los lápices es tan inestable que la menor variación en el ambiente que los rodea puede afectar su equilibrio.
Es decir, un pequeño temblor en la superficie donde están apoyados o un ínfimo movimiento de la corriente de aire provocado por la respiración, pueden hacer girar el lápiz hacia un lado u otro.
El truco
A diferencia de la ouija, donde los jugadores deben
apoyar su mano en un plato o una copa (y por ende están en contacto con
el objeto que se mueve), en este juego, los lápices parecen moverse
solos -o de acuerdo a los "designios" de Charlie.
¿Y si no se mueven?
Si motivado por la reacción en las redes lo pusiste a prueba, puede que te haya pasado lo mismo que nos pasó a muchos: los lápices no se inmutaron.
Eso ocurre cuando no están alineados perfectamente o cuando la superficie de contacto (por ejemplo si el lápiz tiene una superficie facetada) es demasiado grande.
En ese caso, se produce demasiada fricción y no se genera movimiento.
Listo, no más
#CharliCharlie para mi, y espero que para ustedes tampoco.
